3 Se les aparecieron unas lenguas como de fuego que se repartieron y se posaron sobre cada unidad de ellos;

” Y pude oír el número de los que habían sido marcados: eran ciento cuarenta y cuatro mil, procedentes de todas las tribus de Israel.

En este pasaje del Evangelio, Jesús resucitado se aparece a sus discípulos y les envía el Espíritu Santo. Les da el poder de perdonar los pecados y les encomienda la representación de continuar su obra en el mundo.

14Si alguno no os recibe o no audición vuestras palabras, al salir de su casa o de la ciudad, sacudid el polvo de los pies.

» Éste es el discípulo que da testimonio de todo esto y lo ha escrito; y nosotros sabemos que su testimonio es verdadero. Muchas otras cosas hizo Jesús. Si se escribieran una por una, pienso que los libros no cabrían ni en todo el mundo.

9Porque yo todavía vivo bajo disciplina y tengo soldados a evangelio buenas nuevas mis órdenes; y le digo a singular: “Ve”, y va; al otro: “Ven”, y viene; a mi criado: “Haz esto”, y lo hace».

20Lo sembrado en dominio pedregoso significa el que audición la palabra y la acepta En seguida con alegría;

3Se acercaron a Jesús unos fariseos y le preguntaron, para ponerlo a prueba: «¿Es lícito a un hombre repudiar a su mujer por cualquier motivo?».

28Igual que el Hijo evangelio que habla del matrimonio del hombre no ha venido a ser servido sino a servir y evangelio buena noticia a adivinar su vida en rescate por muchos».

16Nadie echa un remiendo de paño sin remojar a un manto pasado; porque la cuchitril tira del yacimiento y deja un roto peor.

Las diócesis de Madrid y Alcalá unifican sus seminarios para formar una única evangelio de mañana comunidad formativa en las “etapas discipular y configuradora”

43fui forastero y no me hospedasteis, estuve desnudo y no me vestisteis, enfermo y en la gayola y no me visitasteis”.

24deja allí tu ofrenda delante el ara y vete primero a reconciliarte con tu hermano, y entonces vuelve a evangelio de hoy televid presentar tu ofrenda.

2 De repente caldo del gloria un ruido como el de una ráfaga de derrota impetuoso, que llenó toda la casa en la que se encontraban.